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Las moscas exóticas de la fruta, son insectos que causan daños en hortalizas y una gran cantidad de frutos; estas plagas se dispersan fácilmente por medio del viento, incluso por los medios de comercio debido al traslado de frutos que fungen como portadores; otra vía de dispersión se da a través de la movilización turística.
El ingreso de esta plaga puede provocar grandes pérdidas económicas para los productores, los sectores de empaque y distribución y los comerciantes.
Existen cuatro especies de moscas de la fruta de importancia económica:
La mosca de los cítricos.
La mosca del mango.
La mosca de la guayaba.
La mosca de los zapotes, son nativas de américa y se distribuyen en las áreas tropicales y subtropicales, causan daños al alimentarse de los frutos provocando pérdidas económicas considerables.
En México ha sido puesta en marcha la Campaña Nacional contra Moscas de la Fruta (CNMF) con el objetivo primordial de controlar, suprimir y erradicar el ataque de esta plaga . La CNMF ha sido sustentada en el concepto de manejo integrado de plagas incluyendo las acciones de trampeo y muestreo de frutos.
Para el control de estas plagas se utilizan estrategias mayormente biológicas, como la liberación de moscas de la fruta que se han vuelto estériles mediante irradiación. Así como la liberación de avispas que son enemigos naturales de la plaga.
El establecimiento y mantenimiento de zonas libres de moscas de la fruta ha permitido la exportación de frutos sin orden de tratamiento cuarentenario de postcosecha; asimismo, al estar ausente la plaga no se realizan actividades de control: "como la aplicación del cebo selectivo", adicionalmente se disminuyen los costos y los daños al ambiente por la reducción en el uso de insecticidas.
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